No escribo porque tus ojos se secaron,
volvieron a ser lo que fueron, polvo
que ahora viaja por las dunas invisibles.
No escribo si no me lees, no me escuchas,
a donde vuelan tus gaviotas sordas,
los campanarios me entristecen los tímpanos.
No escribo porque no me lees, no me sientes,
se ha secado la fruta que aún no madura
y cayó sin ser extrañada, se pudrió…
PcWolf.
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