Se sentó a esperar
una a una las estrellas;
empezaron a desfilar
las corrientes de querellas;
junto al río vio la luz que la lastimó
con el canto de las aves se ensordeció.
Amaba a la noche plutónica de bellas sombras,
sombras extrañas, danzas de almas lujuriosas;
cantos tan dolientes elevándose desde el infierno;
demonios a cuatro patas partiéndose sus cuernos.
Amaba a la noche y su eterno duelo;
ella la cubría de negro terciopelo,
es una Rosa de cementerio.
Al amanecer Rosa morirá
y una lápida adornará
en un jardín de muertos.
PcWolf.
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